Advierte analista Jorge Arévalo Acha:
Partido Nacionalista, Sutep y Construcción Civil están detrás de la violencia en Piura
Organizaciones políticas y gremiales de carácter radical como el Partido Nacionalista, el Sutep y Construcción Civil están involucrados en la violencia desatada en Piura que dejó ayer un saldo de cinco muertos, afirmó Jorge Arévalo Acha, analista político y periodista en esa ciudad.
Arévalo Acha dijo que la congresista Marisol Espinoza, de las filas del Partido Nacionalista (PN), hace varias semanas inició un trabajo de proselitismo entre los comerciantes informales que trabajan en los alrededores del Complejo de Mercados de Piura, con la finalidad de oponerlos decididamente a la reubicación ordenada por la municipalidad provincial.
La parlamentaria ha "desinformado y azuzado" a los comerciantes con el fin de tratar de fortalecer a un grupo minoritario de informales que se opone amenazadoramente a la reubicación y que hace dos semanas expresó públicamente que "correrán ríos de sangre" si la autoridad procedía al desalojo, sostuvo el analista.
Argumentó que no es nada casual que Espinoza –quien es vocera del partido que lidera Ollanta Humala- esté vinculada con esa minoría de comerciantes que publican pronunciamientos violentistas.
Este grupo minoritario, señaló, también ha recibido el apoyo público de la filial del Sindicato Unitario de Trabajadores en la Educación del Perú (Sutep) en Piura y del gremio de Construcción Civil.
En consecuencia, el analista expresó su convencimiento de que este grupo minoritario –el cual está encabezado por Nicander Caqui, "quien purgó prisión por narcotráfico"- está infiltrado por radicales políticos que aprovecharon la orden municipal de desalojo "para generar el caos en la ciudad".
Esta explosión de violencia, sostuvo, estuvo "planificada" con varios días de antelación por ese grupo minoritario con el apoyo del Sutep y Construcción Civil.
Arévalo Acha estimó que de los dos mil comerciantes informales, aproximadamente, que trabajan en los alrededores del Complejo de Mercados, solo un centenar se opone al traslado al sector de Las Capullanas y otros, como lo dispuso la municipalidad provincial.
Un día de terror
El pánico se apoderó ayer de la ciudad de Piura donde cinco personas murieron y decenas resultaron con heridas durante los actos de violencia protagonizados por un grupo de comerciantes informales junto con pandilleros y vándalos armados de piedras, palos y armas punzocortantes.
Una marcha en contra de la ordenanza municipal de desalojo desencadenó un enfrentamiento con efectivos de la Policía Nacional.
Los comerciantes, acompañados por gente de mal vivir, lanzaron piedras y palos contra los agentes del orden que respondieron con bombas lacrimógenas para dispersarlos.
La situación fue aprovechada por los pandilleros para atacar y saquear diversos locales, entre ellos establecimientos comerciales y de servicios, ubicados a pocos metros del centro de la ciudad.
Participación clave de pandilleros
Al respecto, Arévalo Acha afirmó que durante la violencia desatada ayer, la participación de numerosos pandilleros e incluso obreros de Construcción Civil, creó la falsa impresión de que la mayoría de los comerciantes informales se oponen al ordenamiento dispuesto por la municipalidad.
Precisamente, dijo, los "grupos de choque" de este grupo minoritario de comerciantes son bandas de pandilleros y delincuentes.
El analista advirtió que este grupo de comerciantes en coordinación con grupos radicales no va a retroceder en "jugar a la violencia" por ello es urgente mayor presencia de las fuerzas del orden en la ciudad.
La alcaldesa de la municipalidad provincial de Piura, Mónica Zapata de Castagnino, por su parte responsabilizó a los dirigentes de esa facción de informales por los muertos, heridos y desmanes ocurridos ayer en la ciudad.
Denunció que durante la marcha se infiltraron elementos de mal vivir, quienes- dijo- fueron contratados por la plana de dirigentes a fin de causar daños.
Reforzamiento policial
En tanto, más de 300 efectivos policiales están a cargo del control de la ciudad de Piura, informó hoy el ministro del Interior, Octavio Salazar.
Precisó que en estos momentos hay más de 300 efectivos policiales de diferentes unidades pertenecientes a Piura, Lima y otras ciudades. Se ha dispuesto el envío de más agentes para garantizar el control y el orden en esa ciudad norteña.
El director general de la Policía Nacional, Miguel Hidalgo, por su parte precisó que hay 137 detenidos y aseguró que la situación está completamente controlada.
No obstante, el Gobierno Regional de Piura y la Dirección de Educación ordenaron la suspensión de las labores escolares para el día de hoy.
Cabe indicar que los miembros de la Comisión de Defensa del Congreso de la República respaldaron hoy de manera unánime a la Policía Nacional en las acciones de restauración del orden público en Piura, donde fallecieron cinco personas tras actos de violencia registrados en la víspera en esa ciudad.
Durante una sesión extraordinaria, en la que participó el ministro del Interior y el director de la Policía Nacional; legisladores de diversas bancadas brindaron su apoyo a la intervención policial ante una turba que provocó destrozos a la propiedad pública y privada.